Se nos encarga el estudio para la reforma del Restaurante Palette en Torremolinos con la idea de actualizarlo.
Es un restaurante funcionando a pleno rendimiento en verano con un público determinado. La propiedad quiere rentabilizarlo en la temporada baja llegando también a un público más selecto; sus menús sí que alcanzan ese nivel, por eso la necesidad de mejorar las instalaciones.
El restaurante consta de dos partes bien diferenciadas, la parte interior donde están las instalaciones de la cocina, aseos y un pequeño comedor reformados no hace mucho tiempo y la amplia zona de la terraza, cubierta en parte con un techo fijo y otra parte con lamas abatibles.
Nuestro trabajo consistirá en darle una nueva vida a esta zona con nueva distribución, iluminación, cambios de materiales y mobiliario. Mantenemos los colores corporativos de la Palette y los usaremos para realzar algunos elementos como lámparas, manteles, tapicería, etc.
Empezamos por proponer un cambio en la entrada al local. Situamos al centro la entrada principal, desde la plaza, y le damos más protagonismo con la ayuda de una alfombra hecha de material resistente que recorrerá a lo largo el local. De esta manera nos encontramos a la izquierda con una mesa de apoyo donde colocaremos un elemento llamativo, puede ser un gran centro de flores, ramas secas, etc. Ahí aprovecharemos para poner de una manera elegante la información que nos interese. De esta forma también se mejora la circulación y el espacio interior y exterior.
Cambiamos el color blanco de toda la estructura metálica (pilares y cerchas) por un gris oscuro o negro mate que realzará el local y le dará un aspecto más actual.
Dentro de la terraza tenemos que distinguir dos ambientes para los meses de menos calor: la zona de techo fijo y la de las pérgolas. Un separador ligero de aluminio y plástico rígido transparente (policarbonato compacto), con puertas correderas y desmontable en verano, creará la función de hacer estos espacios más confortables.
Dentro de la nueva distribución creamos un banco corrido de madera con asientos y respaldo tapizados con tela antimanchas y repele líquidos en la parte del fondo. Para completar este ambiente colocamos unas bonitas lámparas de iluminación directa con los colores corporativos sobre las nuevas mesas que se podrán unir según las necesidades.
Con unos separadores formados por altos y estrechos maceteros con ruedas, de plantas naturales que requieran poco cuidado, preparamos una zona para pequeñas reuniones en la parte izquierda del local, así pueden tener un acceso más independiente desde la entrada lateral.
Para unir la terraza cubierta con el pequeño comedor proponemos una gran mesa de madera natural, o dos más pequeñas que se puedan unir, nuevas sillas y una gran lámpara de luz directa, similar a las del interior del comedor, con base en el pilar más cercano.
El mueble auxiliar que utiliza el personal, lo restauraremos y lo desplazamos a un lugar menos visible y que siga siendo práctico. Colocamos en su lugar una mesa de apoyo a cocina más integrada con el entorno.
Una celosía, si hiciera falta, combinada con una pared vegetal a la derecha de la cocina, en lugar de los azulejos actuales, harían de telón de fondo.
En la zona de pérgolas abatibles, detrás de la mesa auxiliar de la entrada, colocamos una gran mesa cuadrada de madera natural para dar sensación de cambio de mobiliario y la acompañamos por nuevas sillas y una gran lámpara de pie que cae sobre el centro.
El resto del espacio se distribuye a derecha e izquierda con las mesas y sillas actuales con nuevos cojines y nuevas mantelerías.
Para el suelo se podría estudiar la colocación de una tarima para exteriores, sintética o natural, similar a las que se ponen alrededor de las piscinas.
Al exterior le damos un gran cambio con unos nuevos toldos oscuros con iluminación, mesas altas más informales y sofás resistentes a la lluvia.
La iluminación es básica para la mejora del restaurante. La propuesta es una combinación de luces de distinto tipo y función.
13 febrero, 2020